¿Quién no ha soñado alguna vez con ser una estrella de Hollywood y caminar por la red carpet? Yo sí lo he hecho, y como me cansé de soñar, me he comprado una gran alfombra roja para llenar de glamour mi sala, no hay fotógrafos ni periodistas pero es lo de menos.

El rojo simboliza poder, vitalidad y ambición. También expresa confianza en sí mismo, coraje y optimismo.
Ya de por sí, una alfombra o carpeta es un recurso práctico para sectorizar, vestir o crear un punto focal. Además ofrecen calidez y confort. Cuando elegimos una de un color como el rojo, debemos prestar atención a los elementos que tiene alrededor. El mobiliario puede ser de colores neutros, como el blanco, el gris o el beige, o de materiales como la madera o el metal. El estilo que posean determinará que clase de alfombra elegiremos, su textura y densidad. Un piso de color claro dará la iluminación que se necesita cuando recurrimos a carpetas de colores oscuros.

Hay elementos que elegidos sabiamente pueden ser los determinantes de la decoración. Una alfombra roja es un ejemplo de ello.

Escrito por Cecilia Favier de Decocasa

Fuente Imágenes: Modern Luxury Furniture, Shiny Interior, Dekrisdesign, Arhzine