Si me preguntan que espacio prefiero diseñar, debo confesar que es el cuarto de baño. Me gusta darle personalidad y que los que pasen por él, lo recuerden. Lo encuentro interesante e importante. Y la tendencia me acompaña.
Aunque suele ser uno de los espacios más reducidos del hogar (y graciosamente el más visitado), la llegada al mercado de nuevos artefactos que nos invitan a relajarnos y olvidarnos del stress diario como las bañeras jacuzzi o las duchas hidromasaje, ayudó a que pasara a tener un papel fundamental en nuestra vida diaria, reclamando más confort y diseño.

Cuando diseñamos un cuarto de baño, el primer punto a resolver es el espacio a utilizar para definir que artefactos colocaremos y de que manera los distribuiremos.
El revestimiento le sigue en importancia. El microcemento está de última moda por su sencillo mantenimiento y por las posibilidades que brinda al adaptarse en paredes, pisos y mesadas. A los porcelanatos y cerámicas de siempre se le incorporan modernos diseños que simulan ser de pieles, cueros, metales y maderas permitiendo combinar modelos diferentes.

La oferta de griferías es inagotable. A diario salen nuevos diseños modernos, ligeros, funcionales y sobre todo estéticos, logrando que llamen la atención y se conviertan en protagonistas de la habitación.

En cuanto a la iluminación, siempre es una gran ventaja contar con luz natural. En caso de no tener esta opción, existen diversos modelos de apliques de pared y arañas.

La distinción de cada baño pasa también por los accesorios que se elijan y el estilo que se le quiera dar con ellos, pudiendo ser romántico, moderno, clásico, entre otros.

Escrito por Cecilia Favier de Decocasa

Fuente Imágenes: Porcelanosa