Al comenzar un nuevo año la mayoría de las mujeres y por qué no, algunos hombres, nos fijamos metas para cumplir. La más popular es comenzar con la actividad física. Muchas veces por falta de tiempo, dinero o por simple comodidad, preferimos quedarnos en casa. Vamos a intentar trasladar el gimnasio a ella.

Los aparatos de ejercicio físico se han convertido en parte de la decoración y ya no se relegan a un cuarto trasero.
Antes de montar un plan, debemos considerar tres aspectos: las necesidades de ejercicio, el presupuesto y el espacio con el que disponemos.
Según nuestras necesidades -mantenimiento, pérdida de peso, etc.- recurriremos a determinados equipos. Si odiamos los abdominales olvidémonos de las camas de 1.70 mts. de largo o de colchonetas.
Artículos para la actividad física los hay para todos los bolsillos, pero siempre nos tienen que brindar seguridad y comodidad ante todo. A veces es preferible comprar un equipo que sirva para la gran parte de los ejercicios que comprar cada uno por separado.
Destinar una habitación sobrante para instalarlo es una muy buena idea, pero en caso de no contar con ello, podemos recurrir a algún rincón de la sala o del playroom. Procuremos que el área elegida sea ventilada y esté muy bien iluminada. Para no romper con el estilo de decoración podemos combinar tapizados, manijas y demás accesorios.
Más allá de esto, cada vez más firmas diseñan aparatos específicos para colocar en el hogar, con líneas más decorativas que se adaptan a diversos ambientes.

Claramente, hoy en día, no es imprescindible tener que salir de casa para mantenerse en forma.

Escrito por Cecilia Favier de Decocasa

Fuente Imágenes:  Fitsugar, The exercise bike, Home interiors zone