Paule Caillat es una cocinera francesa que además de todo lo que hace, guía pequeños grupos por los mejores mercados de París a los que luego enseña a cocinar con los ingredientes comprados. Por supuesto que para dar estas clases necesitaba tener un lugar acondicionado. ¿Qué les parece esta enorme cocina diseñada especialmente para instruir a sus alumnos?

Este lugar ideal era antiguamente una fábrica a la que remodelaron completamente transformándola en un complejo de apartamentos. Obviamente que Paule tuvo que derribar tabiques y empezar de cero, pero el resultado valió la pena.

La cocina debía ser funcional para no entorpecer ninguna tarea. El espacio que hay es lo más importante que tiene este ambiente ya que de lo contrario sería imposible que allí trabajen o aprendan varias personas a la vez. De esta manera, tanto ella como sus alumnos pueden moverse cómodamente.

La encimera de granito es resistente a los golpes y a los productos químicos lo que permite una mejor limpieza.
La luz natural también es esencial y se acompaña muy bien con luz artificial general y puntual en el área de la isla central y en las zonas que se ubican debajo de la alacena.

Pero además de tener los artefactos y utensilios básicos y necesarios en cualquier cocina, esta chef se da el lujo de incluir una bodega embutida en la pared (muy buena idea) y una super biblioteca la cual seguramente sea fuente de inspiración.

Escrito por Cecilia Favier de Decocasa

Fuente Imágenes: Apartment Therapy