Para empezar bien la semana y encantar a la vista, les traigo una recopilación de fotografías de una casa con una decoración exquisita.

El color blanco es el que está presente en toda la planta, tanto en la estructura como en el mobiliario: un recurso muy utilizado para multiplicar la claridad y la sensación de amplitud. Las cuotas de color aplicadas en los detalles hacen que éstos sean los responsables de un resultado perfecto.

Haciendo a un lado las áreas privadas, el resto de los ambientes está totalmente integrado: emplear un único color, en este caso blanco, en cielo rasos  y paredes y un mismo piso para todas las áreas colaboran para crear espacios abiertos.

Se aprovecharon al máximo los espacios para crear zonas de guardado. En el caso de la cocina, se ocultaron las alacenas y otros accesorios detrás de correderas de cristal esmerilado y así mantener el orden y unificar el frente.
Por otro lado, en el dormitorio se instalaron armarios suspendidos y  con espacio sobrante una práctica biblioteca.

Algunos detalles son excelentes: la alfombra que sectoriza la sala y las dos butacas modelo Lümmen son realmente atractivas. En el comedor, la lámpara de techo a su vez funciona de apuntador ya que en ella pueden colocarse notas o mensajes que queramos tener presentes. Los nichos laqueados en negro rompen con la uniformidad del blanco y crean más espacio de guardado.

¿El resultado? Una casa donde la sensación de amplitud y claridad invade cada espacio y los detalles en colores se llevan todas las miradas. Definitivamente yo podría vivir allí.

Escrito por Cecilia Favier de Decocasa

Fuente Imágenes: Nicety Live Journal